Nuestros sueños se presentan aislados para dar sentido a nuestra vida.

Se van haciendo mas grandes y complicados.

Empezamos a caminar firmemente con ilusión.

Nos acercamos a la cima.

El camino es largo, necesitamos coger nuestro soñado tren.

En lo más alto un increíble lago nos espera.

El maravilloso lago se llena de un color turquesa.

Los sueños han terminado debemos volver a la realidad.

Esa realidad cargada de tradición, poder y seguridad.

Nos vamos con la música a otra parte.

Con cien cañones por banda, a toda vela.

No será fácil volver a empezar a subir las escaleras de nuestros sueños.

Pero, siempre hay que mirar hacia arriba con ilusión.